Después de haberse dado a conocer la noticia de la muerte de la hija de la conductora rocío Sanchez azuara, entre llanto, melancolía y vacío, ha decidido dar sus primeras declaraciones, quédate conmigo y entérate de esta información, sin mas preámbulo comenzamos….

Hace unos días, el mundo del espectáculo se estremeció al enterarse de la muerte de la hija de Rocío Sánchez Azuara. El día de hoy, la famosa se dio a la tarea de utilizar sus redes sociales para confesar cómo fue el triste suceso.

Tras saludar a sus seguidores, la presentadora explicó que decidió hacer la transmisión para agradecerles por su apoyo y sus muestras de cariño.

Asimismo, Rocío detalló que los medicamentos que requería su hija fueron donados, pues son sumamente caros, y explicó que los restos de la joven fueron cremados, tal y como ella lo había pedido.

La luminaria comentó que Daniela murió junto a ella y tranquila, aunque confesó que la situación ha sido muy dolorosa y complicada.

‘El resultado no fue el que yo hubiera querido, regresarla a casa. Falleció el lunes (23 de septiembre) en la madrugada (a la 1:15 a. m.) y yo estuve con ella hasta el último segundo que pude estar. Murió en mis brazos, murió en paz’ explicó Sánchez.

La famosa aprovechó la plataforma para decirles a sus seguidores que no es la persona indicada para dar recomendaciones sobre el lupus, enfermedad que venció a su hija, y les recomendó que si se enfrentaban a un problema de salud de esa magnitud, acudieran con un profesional.

Rocío detalló que Daniela llevaba dos décadas luchando contra el padecimiento autoinmune, así como que falleció por complicaciones renales y coronarias.

La presentadora confesó que la joven tenía tres de las cuatro válvulas del corazón dañadas, lo que empeoró su salud notoriamente.

Daniela estuvo internada en un hospital por tres meses después de que un microorganismo se alojara en un catéter durante una de sus hemodiálisis e ingresara a su torrente sanguíneo.

El Lupus Eritematoso Sistemático ataca órganos sanos al identificarlos como ‘objetos extraños’. Generalmente, las personas que sufren esta condición ven un deterioro grave en los riñones, cerebro, piel, articulaciones y muchas veces padecen anemia.



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